La Sala IV resolvió no hacer lugar al pedido de recusación de la defensa de Amado Boudou contra el juez Juan Carlos Gemignani, un pedido que había contado hoy con el apoyo del fiscal Javier De Luca Los abogados de Boudou en el caso Ciccone, Eduardo Durañona y Diego Pirota, habían pedido el apartamiento de Gemignani bajo la acusación de que había prejuzgado al resolver el planteo de nulidad formulado respecto de la validez del testimonio de Laura Muñoz por la circunstancia de ser cónyuge de Alejandro Vandenbroele.
La Casación validó en octubre el testimonio de Muñoz, quien aseguró que su ex marido tenía negocios con el vicepresidente. En ese fallo que fue de 3 votos a 0, Gemignani solicitó al juez del caso, Ariel Lijo, que dí la máxima protección a Muñoz, tras concluir que la mujer se enfrenta a "un grupo que, en consideración del cargo público ostentado por uno de sus integrantes [Boudou], podía razonablemente asignársele una capacidad operativa de significativa trascendencia" para lastimarla. El voto de Gemignani fue el que más consideraciones tuvo y por eso la defensa de Boudou señaló que prejuzgó y que no era imparcial.
La recusación fue rechazada por tener en cuenta que "las alegaciones respecto de la seguridad de la testigo Laura Muñoz eran referencias a sus propios dichos en la declaración testimonial referida aun cuando se reconoció la posibilidad de interpretaciones equívocas", indicó el CIJ.
Así, quedó definida la integración del Tribunal de Casación que tratará la investigación por la venta de la ex Ciccone: será la Sala IV conformada por Gustavo Hornos, como presidente, y como vocales Mariano Hernán Borinsky y Juan Carlos Gemignani.
Fuente: otrosambitos.com.ar