La presidente Cristina de Kirchner participó por primera vez en su gestión del Tedeum en la Catedral Metropolitana, con motivo del nuevo aniversario de la Revolución de Mayo Al encabezar la celebración, el arzobispo de Buenos Aires, Mario Poli, realizó un enírgico llamado al "diálogo" y citó al papa Francisco.
"Cuando los líderes de diferentes sectores me piden un consejo, mi respuesta es siempre la misma: diálogo, diálogo, diálogo", dijo Poli, parafraseando a Jorge Bergoglio.
En sentido, señaló que "el único modo de que los pueblos avancen es la cultura del encuentro, en la que todo el mundo tiene algo que aportar". "O se apuesta por el diálogo, por la cultura del encuentro, o todos perdemos", sentenció el arzobispo.
Poli afirmó que "la construcción de la patria nos compromete a todos" y que "la unidad entre hermanos sigue siendo la ley primera", al tiempo que pidió "dejar de lado el orgullo".
La mandataria no concurre a la Catedral de la Ciudad de Buenos Aires desde 2006, cuando acompañó como primera dama y senadora nacional al entonces presidente, Nístor Kirchner, al Tedeum por el 25 de mayo. Esa fue la última visita de un jefe de Estado a ese recinto.
La Presidente se trasladó al mediodía desde la Casa Rosada a la Catedral junto a todos los ministros del Gabinete, para asistir a la ceremonia. Además, se cruza allí con el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, quien todos los años asiste a la Catedral para la conmemoración de la Revolución de Mayo de 1810.
Cristina y Macri estuvieron frente al altar y detrás de ellos se ubicaron, entre otros, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, entre otros funcionarios del gabinete nacional y de la Ciudad, legisladores y representantes de las Fuerzas Armadas.
La atención estaba puesta en la homilía que pronuncia Poli, quien encabezó la ceremonia por primera vez desde que su antecesor, Jorge Bergoglio, fue nombrado Papa en 2013 y lo designó a íl como arzobispo de Buenos Aires y cardenal primado de la Argentina.
La noticia del regreso del Tedeum a la Catedral Metropolitana se conoció en febrero último y constituye un reflejo de la nueva relación entre el Gobierno y la Iglesia, inaugurada desde la llegada de Bergoglio a la cúpula de la Santa Sede.
El kirchnerismo cortó con la tradición de celebrar el Tedeum en la Catedral luego de que en 2006 el entonces cardenal Jorge Bergoglio pronunciara una dura homilía contra la clase política en presencia de Kirchner y de la entonces primera dama.
A partir de 2007, el matrimonio Kirchner decidió llevar la celebración a distintos puntos del país y no regresó a la Catedral.
El año pasado, la Presidente decidió mantener la realización del Tedeum fuera de la Catedral Metropolitana, por lo que se llevó a cabo en la ciudad de Luján, pero para ese entonces ya le había comunicado a monseñor Poli que en 2014 la ceremonia volvería a la Catedral, aunque la noticia se conoció en febrero.
Fuente: otrosambitos.com.ar