Las cajas negras del vuelo MH17 de Malaysia Airlines, derribado el jueves pasado en Ucrania, llegaron a Inglaterra, con la esperanza de que los expertos hallen información que permita reconstruir lo sucedido Hay una carrera contra el tiempo para establecer las responsabilidades del desastre, mientras crece la tensión entre los Estados Unidos y Rusia.
En Farnborough, en el cuartel general de la británica Air Accidents Investigation Branch (AAIB), los expertos ya comenzaron los trabajos para extraer señales importantes de las cajas negras. Los primeros datos pueden estar disponibles en las próximas 24 horas -lapso generalmente necesario para descargar el material contenido en cada caja- y serán entregados a las autoridades holandesas, que coordinan la investigación internacional y que decidirán quí información revelar.
Las expectativas son altas, dado que no hay pruebas de la manipulación del contenido, la hipótesis más temida. Los dispositivos en cuestión son dos cajas, pero de color rojo intenso para que resulte visible en caso de recuperación. Ambas están pensadas para "sobrevivir" aún en los peores accidentes y por el mismo motivo están instaladas a la altura de la cola del aparato.
Las cajas negras contienen informaciones cruciales, como el registro de los datos del vuelo o todas las funciones operativas activadas por el avión (altura, potencia del motor, trayectoria del vuelo, tiempos y velocidad).
En la práctica, cada vez que el piloto activa un comando, íste es grabado en una de las cajas, con una autonomía que va desde las 17 a las 25 horas de vuelo. Todas las informaciones son útiles para reconstruir el estado del vuelo hasta antes del impacto del misil, disparado probablemente por los separatistas prorrusos en el este de Ucrania.
La segunda caja almacena todas las conversaciones, pero tambiín sonidos y ruidos desde el interior de la cabina del piloto. De allí puede surgir un eventual diálogo entre la tripulación y el piloto, o entre íste y la torre de control.
Para poder recuperar totalmente estas informaciones, es necesario que el traslado de los datos -un download de hecho- se produzca en un ambiente equipado especialmente y protegido, conocido como "replay unit", o sea una habitación con un nivel impecable de aislamiento acústico.
En Europa existen sólo dos de esos sitios, uno de ellos está en Farnborough, motivo por el cual las autoridades holandesas confiaron a los expertos británicos la delicada tarea.
Fuente: otrosambitos.com.ar