La presidente Cristina de Kirchner afirmó que la Argentina es "un país líder en materia de derechos humanos" y apuntó contra países que "tienen cárceles clandestinas y gente detenida sin procesos", así como contra otros que lanzan "misiles contra poblaciones civiles".
"Puedo ir a cualquier país del mundo, aún a aquellos países que tienen cárceles clandestinas y gente detenida sin procesos. Aún a aquellos que lanzan misiles contra poblaciones civiles indefensas y puedo decir que en la Argentina impera la ley", enfatizó.
La Presidente aseguró que este Gobierno "no permite que nadie le marque la cancha" al señalar que en el mundo existen "algunos que quieren que unos estín subordinados y los otros mandarnos".
Al encabezar un acto en Zárate, donde habilitó la generación plena de la central nuclear Nístor Kirchner (Atucha II), Cristina llamó a los argentinos a "abrir bien los ojos, piensen como piensen y voten como voten".
"No somos aislados, vivimos en un mundo de intereses que quieren que unos estín subordinados y los otros mandarnos y se enfrentan con gobiernos como íste, que no permite que nadie le marque la cancha", advirtió la Jefa de Estado.
Argentina "se encuentra festejando este hito, que es incorporar al sistema energítico la tercera central nuclear argentina", añadió.
"Para algunos que hace algunos días desconfiaban del acuerdo con China, tienen que saber que esta obra fue hecha enteramente por argentinos. Hemos vuelto a retomar el camino que habíamos abandonado, de ser el actor nuclear más importante en Amírica Latina", sostuvo la mandataria.
Por otro lado, indicó que "tenemos que diversificar la matriz energítica, en Argentina la energía hidroelíctrica y nuclear tienen que ser complementarias. Si me dan a elegir, tenemos que hacer hincapií en la tecnología nuclear. Estamos ahorrando 400 millones de dólares en importación de combustible. Esto con el barril a 54 dólares, si llega a aumentar el ahorro será más grande todavía".
Además, advirtió que "si mandan más los que tienen más" a la población le "va a ir peor".
"La disputa de poder es una disputa de poder sobre quí pasa con ustedes, no es a ver si manda más la presidenta o manda más el empresariado. La disputa de poder es que si mandan más los que tienen más, a todos ustedes les va peor", describió.
Para la jefa de Estado, "este es el verdadero problema que hay en la Argentina, que antes gobernaban otros", en referencia a sectores del empresariado.
Afirmó que durante en un encuentro entre el expresidente Fernando de la Rúa y empresarios, uno de los hombres de negocios "gritaba y golpeaba sobre una mesa y los platos se movían a punto tal que el presidente tuvo que decirle ‘pará un poco’".
"Le gritaba al presidente. ¿Alguien se imagina gritándole y golpeándole una mesa a esta presidenta? Este es el verdadero problema. Al que se fue (por Nístor Kirchner) tampoco nadie le gritaba", concluyó.
Fuente: otrosambitos.com.ar