El precandidato presidencial por el frente Cambiemos buscó diferenciarse de su competidor en las PASO, Mauricio Macri, y aseguró que "junto a mi vicepresidente, Lucas Llach, estamos en mejores condiciones para unificar al país". Además, consideró que "es un mito que el kirchnerismo tuvo una buena gestión".
Sanz recordó los cuestionamientos que recibió tras el acuerdo nacional con el PRO y contestó: "Yo no le entreguí el radicalismo al PRO, eso es una chicana que se fue perdiendo con el tiempo. Nuestro partido va a ser parte del próximo gobierno de coalición, por lo tanto no hay ninguna entrega".
Asimismo, argumentó que "hoy nuestro frente se transformó en la verdadera alternativa al kirchnerismo. La más potente, esperanzadora y confiable. Vamos a llevar adelante unas elecciones primarias con madurez", aunque aclaró que habrá "muchas diferencias en las propuestas".
Precisamente, cuando el radical fue consultado sobre quí lo diferencia de su rival en la interna, Mauricio Macri, aseguró: "Yo represento la búsqueda de la unidad. Con mi vicepresidente, Lucas Llach, estamos en mejores condiciones para unificar a la Argentina detrás de un proyecto común. Nosotros podemos generar un proceso mucho más potente para lograr la unificación del país".
Con el objetivo de intentar meterse en la puja por la presidencia entre los principales precandidatos, subrayó: "Esta brutal polarización necesita de un liderazgo integrador".
Por otro lado, Sanz cuestionó al kirchnerismo por, según su opinión, "dejar el poder con más pobres de los que recibió. Están en un círculo vicioso de mala gestión. Una cosa es hacer que el país aguante y no explote y otra cosa es hacer buena gestión".
En ese sentido, recalcó que "eso no ocurre porque se perdieron empleos, mercados y se cerraron fábricas".
Finalmente, el integrante del frente Cambiemos resaltó que "en el kirchnerismo se quejan de la concentración de poder y ellos lo hicieron como nadie".
Fuente: otrosambitos.com.ar