Durante el festejo se renovó la iniciativa de instaurar el natalicio de Olmedo -24 de agosto- como Día del Buen Humor y se presentó un nuevo circuito turístico que recorre los sitios más representativos de la vida del Negro en su ciudad.
Con un encuentro que reunió a los amigos de Alberto Olmedo junto a autoridades, invitados especiales y prensa, la ciudad de Rosario celebró hoy el 82 cumpleaños del querido actor y humorista rosarino. El festejo permitió reimpulsar la idea de declarar esta fecha como Día Nacional del Buen Humor y dio lugar al lanzamiento de un nuevo circuito turístico.
Víctor Morjosí, Osvaldo Martínez y Bernardo “Chiquito” Reyes, quienes fueran parte de la barra del Negro, se sumaron a esta celebración que tuvo lugar en el restaurante La Chancha y los 20, donde funcionara el bar El Aviador, en la esquina de Salta y Suipacha. “Esa era nuestra esquina”, advierte Martínez, recordando que cuando eran jóvenes se reunían allí con el Negro y otros amigos del barrio antes de salir juntos a sus clases de acrobacia.
Además de aquellos amigos de la infancia, en el evento estuvieron los secretarios de Turismo, Híctor De Benedictis, y de Cultura, Horacio Ríos, entre otras autoridades; invitados como la artista Carmita Batlle, autora de la escultura en bronce de Olmedo ubicada sobre calle Rivadavia; Dante Taparelli, director de Diseño Urbano de la Municipalidad y uno de los impulsores de esa escultura, y Horacio Castaño, director del Centro Asturiano donde el Negro dio sus primeros pasos en el teatro, entre otros.
Sumando el atractivo de una esquina adonde solía ir Olmedo, el evento fue planteado como una reunión de amigos entre mesas con cafís, medialunas y los nuevos folletos que describen tanto la vida del Negro en la ciudad como el circuito turístico recomendado para revivir aquellos pasos. Fue un encuentro ameno en el que no faltó la torta con el número 82 para el momento de soplar las velitas.
A su vez se reunieron firmas para la instauración del natalicio de Olmedo -24 de agosto- como el Día del Buen Humor, idea que surgió informalmente el año pasado, multiplicándose rápidamente en las redes sociales y sumando el apoyo tanto de los amigos del Negro como del Ente Turístico Rosario y la Secretaría de Turismo.
Alberto Olmedo nació un 24 de agosto de 1933 en el barrio Pichincha y se convirtió en uno de los más grandes humoristas argentinos. Con su estilo transgresor y su irrefrenable capacidad para improvisar, dejó una huella imborrable en el cine y la televisión nacional. Murió a los 55 años, en un trágico accidente. Pero como dicen sus amigos, “nadie se va a ir del todo de este mundo si existe alguien que lo recuerde”.
“Rosario ocupa uno de los primeros lugares en mi corazón. Es mi tierra. Son los amigos entrañables de la infancia, esos que no se olvidan jamás. Cuando siento que las pilas me fallan, voy a cargarlas allá”.
Alberto Olmedo
Referencias del nuevo circuito
Algunos sitios se pueden recorrer y otros son referencias de un pasado que ya no está, pero todos ayudan a definir las coordenadas entre las cuales Olmedo se movía en Rosario. Seguir estos pasos permite conocer tanto los lugares como las calles que marcaron su infancia y su juventud.
Casa natal – Callao 73bis. La casa de una tía, donde nació y pasó tiempo de su infancia.
Donde vivió de chico – Tucumán 2765. El antiguo conventillo donde vivía Olmedo ha sido reemplazado por nuevas construcciones.
Escuela Juan F. Segui – Ricchieri 350. Su escuela, hasta 5º grado.
Iglesia de la Inmaculada Concepción – Ricchieri 280. Aquí tomaba la comunión, año tras año, atraído porque al final servían chocolate con facturas.
Escuela Almafuerte – Salta 2558. Donde finalizó la escuela primaria, en horario nocturno.
Teatro Casino – Pichincha y Jujuy. Ya cruzando la adolescencia, en ocasiones supo visitar este teatro frívolo para hombres, del cual hoy sólo queda la histórica fachada.
Verdulería y carnicería de Becacecce – Salta 3111. Lugar de su primer trabajo; hoy es una casa particular junto al Bar El Luchador (que en ese entonces era un almacín de venta a granel).
Casa de Salvador Lianza – Salta 3061. En esta casa el Negro pasó largas horas de su primera infancia. Salvador era como un tío para íl.
Restaurante La Chancha y los 20 (ex bar El Aviador) – Salta y Suipacha. Aquí se reunía con sus amigos antes de ir a NOB. Bajaban por Salta y tomaban Ov. Lagos hasta el Parque de la Independencia.
Newell’s Old Boys (NOB) – Parque de la Independencia. Ingresaban al club por la Puerta 6, frente a El Palomar. La pista donde practicaban acrobacia ha cambiado pero estaba cerca de ese ingreso.
Plaza San Martín. Cuando iba a trabajar a la imprenta hacía el camino con dos amigos del barrio. Desde Pichincha caminaban por calle Córdoba hasta esta plaza y se detenían un rato en el banco que mira a Dorrego.
Centro Asturiano – San Luis 644. Donde Olmedo dio sus primeros pasos en la actuación y el teatro.
Teatro La Comedia – Mitre 950. Además de integrar la claque, aquí se relacionó con distintos artistas. Fue un habituí y hasta se quedaba dormido en “el gallinero” del teatro.
Ombú donde dormía la siesta – Parque España. En su deambular por las calles de la ciudad, el Negro hizo de este lugar un refugio de descanso a pasos del río.
Parrilla Estilo Las Palmas (ex Nuevo Amírica) – Córdoba y Alvear. Aquí funcionaba el restaurante donde el Negro comía con sus amigos cuando, ya famoso, venía a cargar las pilas a Rosario.
Bar La Esquina del Negro – Callao y Brown. Un bar del barrio Pichincha emplazado temáticamente alrededor de la vida de Olmedo.
Escultura en bronce de Alberto Olmedo – Pueyrredón y Rivadavia. El homenaje de su ciudad en el barrio que lo vio nacer.
Fuente: otrosambitos.com.ar