Por: Darío H. Schueri – Desde Santa Fe
El Gobernador Miguel Lifschitz refunfuña por lo bajo por la mezquindad del gobierno nacional para con la emergencia (muy poco y nada, dicen, contra más de 500 que ya desembolsó el gobierno provincial); acicatea a Cambiemos apoyando la ley anti despidos; habla de que “no es ético” para un político (¿Macri?) tener cuentas off shore; que en política “no se puede ser bipolar” (¿radicalismo Pro?) y a la vez aprovecha la salida del default (cuyas leyes para lograrlo el socialismo votó en el Congreso) para pedirle al parlamento local autorización para endeudarse por mil millones de dólares (unos 15 mil millones de pesos) para tapizar la Provincia de obra pública.#
Y no tendrá reelección. Porque no quiere el peronismo; un sector del radicalismo y, porque no, tampoco un sector del socialismo.
Miguel Lifschitz hizo un raid mediático en Capital Federal para visibilizar ante el establishment porteño, sensible cuando hay mucha gente inundada y vacas flotando en los campos, que en la Provincia de Santa Fe el principal problema del devastador fenómeno El Niño es económicamente residual.
Muchísima plata que hoy y por los próximos meses no circulará en los pueblos y ciudades, y que se suma al estancamiento que se venía produciendo, tarifazos mediante (FECECO estimada la baja de ventas en un 30%, elevada ahora a más del 50%). Dicho sea de paso, la Secretaria de Estado de Energía Verónica Geese se quejó por la mora rayana en la desidia del impactante Ministro de Energía Aranguren, quien nunca respondió a la propuesta llevada por el propio Gobernador Lifschitz para financiar a través de CAMMESA a la EPE, y que la empresa provincial traslade a su vez esos beneficios a los industriales. Hasta ahora, como en muchos otros aspectos (que el Gobernador no se privó sutilmente de hacerlo notar en su discurso del 1º de Mayo) la EPE financia los siderales aumentos por su cuenta y cargo.
CARSFE está pidiendo al gobierno nacional que emita un empréstito por cinco mil millones de dólares (de los cuales 2700 millones serían para Santa Fe) avalado por las Provincias perjudicadas, para asistir a los productores y sus economías regionales.
Mientras tanto, Lifschitz declaró la emergencia vial para distribuir entre municipios y comunas los primeros 800 millones de pesos a los fines de reparar la destruida red caminera rural. Nunca una lluvia duró exactamente 26 días consecutivos, según relató el Ing. Rubén Walter de la Bolsa de Comercio de Santa Fe. Campos y caminos se transformaron en pisaderos de ladrillería.
El pedido de endeudamiento por mil millones de dólares que Lifschitz quiere buscar en los mercados de capitales internacionales, cuyo road show inicial ya exploraron con éxito hace un par de meses atrás en EEUU el Ministro de Economía Gonzalo Saglione y su Secretario de Finanzas Pablo Oliver, ingresó por la Cámara de Diputados provocando los celos de la bancada peronista, acostumbrada a ser mimada como Cámara de origen en los últimos cuatro años por Antonio Bonfatti, que no contaba con mayoría en Diputados.
El PRO adelantó que va a pedir un minucioso detalle de la aplicación de ése dinero, y el peronismo algo por el estilo. Los senadores PJ en cambio van a los bifes: ya están elaborando el plan de obras que quieren para sus territorios. Caso contrario, la Ley no verá la luz.
En política la inocencia se paga con votos: si hay que facturar, que sea compartido. El año que viene, cuando teóricamente estén funcionando los obradores para terminar los hospitales, reparar rutas, reacondicionar canales rurales, saneamientos urbanos, entre otros emprendimientos, se estarán confeccionando las listas para renovar concejalías, presidencias comunales y 11 intendencias; y lo más importante de cara al futuro político de los partidos políticos: la elección de diputados nacionales.
Para el intendente santafesino José Corral, pre aspirante al sillón del Brigadier no será una elección más: tendrá que revalidar títulos locales en el Concejo municipal y lograr que su lista de Cambiemos (¿encabezada por Mario Barletta?) le gane a la del FPCyS (¿encabezada por Bonfatti ó Binner?) para ir sumando puntos en el scoring del PRO nacional. Del Sel aguarda desde la sospechada Panamá.
Por eso buscará – como acusa el vehemente diputado del PRO Roy López Molina – seguir cobrando, mientras pueda, en las dos ventanillas: la provincial como integrante del FPCyS, y la nacional como signatario también de Cambiemos. No en vano Lifschitz advirtió ayer que en algún momento los radicales de Cambiemos tendrán que optar entre seguir en el FPCyS o cambiar de club. Corral les pide prudencia a los socialistas, recordándoles que la UCR suscribe la misma cantidad de acciones dentro del FPCyS.
La semana entrante el PRO anunciará un programa de créditos del Banco Nación para los productores en emergencia con tres y seis meses de gracia según la categoría de los certificados – emergencia o desastres – que posean. Y de paso, comprometerán a la Provincia con el 60 % de los recursos (Nación aportaría el 40% restante) para transformar el aeropuerto de Sauce Viejo en estación internacional.
La Cámara de Diputados de Santa Fe aprobó el jueves un pedido de comunicación para que el Ejecutivo provincial interceda ante la Nación para que se incluya a los aeropuertos de Sauce Viejo y Rosario en el plan de obras que el Ministerio de Transporte de la Nación desarrollará en los próximos cuatro años.
Decíamos que semejante plan de obras públicas no podrá ser usufructuado personalmente por el actual Gobernador quien, tal como anticipamos una semana antes en esta columna, ante la Asamblea Legislativa renovó sus intenciones de reformar la Constitución provincial, barnizada semánticamente como una “modernización” y “aggiornamiento”, para evitar ahondar cierto malestar dentro del propio socialismo que, al decir del diputado Eduardo Di Pollina, es un tema “que no se conversó”. El diputado Rubén Galassi ya había cerrado las puertas a un llamado a Convencionales para el año que viene.
La formal ronda de reuniones con miembros de los partidos políticos, académicos y fuerzas de la sociedad civil que debía comenzar esta semana, mutó a conversaciones informales. Como solía pontificar un lugareño en nuestros pagos natales (Sunchales): “Lifschitz está juntando herrumbre”.
El peronismo, y porque no Cambiemos en el radicalismo (y hasta el propio socialismo), sospechan que la decisiva cláusula que posibilite la reelección del Gobernador pueda ser utilizada por el propio Lifschitz, quien anoticiado de la situación no vaciló en admitir que si ése era un impedimento para avanzar en la reforma, estaba dispuesto a no incluirla en el debate. Oscar Blando, director provincial de Reforma Política y Constitucional enfatizó en que “si ese hubiera sido el principal escollo (la reelección del Gobernador) Obeid, Binner y Bonfatti hubieran reformado la Constitución, porque todos se autoexcluían”.
Federico Angelini, futuro presidente del PRO santafesino le puso candado a cualquier discusión atada a la cláusula de reelección; en cambio propone discutir mandatos de 4 años para las Comisiones Comunales, una sola reelección para los cargos legislativos, sistema D´ Hont para la integración de la Cámara de Diputados.
Uno de los estigmas de la gestión Macri es el empleo, o para ser más definitorios el desempleo, que algunos fantasiosos cuantifican en miles por hora.
En la Provincia de Santa Fe, el Ministro de Trabajo Julio Genesini no oculta su preocupación a futuro si la actual situación económica no se revierte, pero observa que hasta ahora no se destruyeron puestos de trabajo; es más, en enero habían advertido un leve crecimiento con respecto del año anterior. Mientras tanto, la Provincia a través del Ministerio de la Producción sigue promocionando el Plan de financiamiento Industrial que tiene muy buena acogida en el sector y ya cuenta con un interesante aporte de los Bancos privados y el Nación incorpotado recientemente con una sorpresiva oferta en la licitación.
El peronismo santafesino irá a elecciones internas este domingo en tres distritos: Santa Fe, Rosario y Villa Cañás. Allí no primó el consenso que a nivel provincial ungiera a Ricardo Olivera como futuro Presidente el venidero 1º de junio. Gioja y Scioli estarán en esta capital una semana más tarde para el acto de asunción que tendrá un verdadero caleidoscopio de interpretaciones políticas.
El futuro político de Santa Fe está empezando.
Fuente: otrosambitos.com.ar