Luego de varias horas de tensas negociaciones, Rusia y las potencias occidentales llegaron a un acuerdo este domingo para que Naciones Unidas supervise las evacuaciones de civiles y combatientes opositores de la ciudad siria de Alepo.#
El proyecto de resolución se votará este lunes en el Consejo de Seguridad de la ONU, que originalmente iba a pronunciarse este domingo sobre una iniciativa francesa con el mismo objetivo.
La amenaza de un veto ruso, sin embargo, frenó el proceso y llevó a una renegociación del texto en busca de un consenso que permitiese su aprobación.
Tras más de tres horas reunidos a puerta cerrada, los embajadores de los quince miembros del Consejo de Seguridad lograron finalmente un acuerdo.
El texto encarga al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, que utilice a personal humanitario que ya se encuentra sobre el terreno para supervisar las evacuaciones de las zonas rebeldes de Alepo.
Además, exige a las partes del conflicto que ofrezcan a esos observadores un acceso seguro, inmediato y sin trabas.
Según la embajadora estadounidense, Samantha Power, el compromiso incluye todos los puntos clave de la iniciativa francesa y hace énfasis en la importancia de proteger a la población que desee salir de la localidad siria.
La diplomática aseguró que la resolución puede ayudar a evitar crímenes contra esas personas y confió en que sea aprobada por unanimidad.
Las potencias occidentales han denunciado en los últimos días supuestas desapariciones de personas evacuadas de Alepo a manos del régimen de Bashar Al Assad.
El embajador ruso, Vitaly Churkin, consideró que al final se ha logrado "un buen texto", después de haberse mostrado muy crítico con el proyecto presentado en un primer momento por Francia.
A su llegada a la reunión, Churkin había adelantado que su país vetaría la resolución si se llevaba a un voto, pues la consideraba "irrealizable y peligrosa".
Para Moscú, la "idea de desplegar inmediatamente personal de la ONU sin preparación en Alepo oriental es propensa a causar un desastre", dado que en la zona sigue habiendo combates entre distintos grupos y pueden quedar terroristas.
Churkin dejó claro que su país está a favor de la que ONU observe las evacuaciones, pero consideraba que ciertos puntos del texto francés lo hacían inviable.
Entre otras cosas, hizo referencia a la necesidad de que esa tarea cuente con el visto bueno de las autoridades sirias si se quiere tener alguna posibilidad de éxito.
Así, Rusia presentó al resto de miembros una propuesta alternativa, que al final se fusionó a modo de compromiso con lo propuesto por Francia.
Fuente: otrosambitos.com.ar