Irán y Hezbollah revisaron el borrador de la Constitución siria que redactó Rusia

 

En el marco de las tensas negociaciones en Astaná para poner fin a la guerra civil siria, una fuente confirmó a Infobae que el borrador de la Constitución siria que entregó Rusia a los rebeldes llegó a manos del régimen de Irán y al grupo terrorista libanés Hezbollah, los principales aliados del dictador sirio Bashar al Assad.#

Uno de los cambios primordiales que presentaría el borrador es la eliminación del término "árabe", agregó esa fuente. El país dejaría de llamarse "República Árabe Siria" bajo la nueva Carta Magna, que pasaría a ser laica.

Esto representa un guiño al régimen persa, que colabora activamente en el conflicto armado con la presencia de miembros de la Guardia Revolucionaria, ya que Irán no es un país árabe.

La iniciativa de Rusia representa un guiño a Irán
Este lunes, el Kremlin anunció que entregó el borrador a los rebeldes sirios, con el objetivo de acelerar las negociaciones políticas y terminar con el conflicto.

"Hemos entregado a la oposición armada siria un borrador de Constitución para Siria preparada por especialistas rusos para que la estudien", explicó el enviado especial ruso, Alexander Lavrentiev.

"Lo hemos hecho exclusivamente para acelerar el proceso" para acabar con la guerra, aseguró.


Una fuente de la delegación rebelde, interrogada en Astaná, confirmó que los rusos les habían entregado el borrador. "Los rusos pusieron un proyecto sobre la mesa, pero ni siquiera lo hemos tomado. Les habíamos dicho que rechazaríamos hablar sobre eso", señaló a la agencia AFP.

En el referéndum organizado en Siria en febrero de 2012, el 89,4% de los votantes aprobaron la idea de principio de una nueva Constitución siria, que aboliría la supremacía del partido Baas, en el poder desde hace medio siglo, pero que aseguraría amplios poderes al jefe del Estado.

Pero la votación fue denunciada por los occidentales y varios países árabes, mientras que la oposición siria la rechazó.

En noviembre de 2015, una veintena de países reunidos en Viena, entre los que se encontraban Rusia e Irán, adoptaron un calendario de salida de la crisis siria.

Éste preveía un encuentro entre el poder y la oposición antes del 1 de enero de 2016, la formación de un gobierno de transición en los seis meses consecutivos y la adopción de una nueva Constitución y la celebración de elecciones libres en los 18 meses siguientes.

Fuente: otrosambitos.com.ar