Por Dario Schueri Desde Santa Fe.
Faltaría exactamente un año para que se llevasen adelante las elecciones PASO nacionales que llevaría a los santafesinos a elegir postulantes para 9 bancas de diputados nacionales y los tres senadores. Los conciliábulos ya comenzaron. El peronismo nacional y provincial en el poder no puede darse el lujo de perder. Alberto Fernández en las nacionales y Omar Perotti en las provinciales. Para el FPCyS serán la prueba del àcido de cara al regreso al poder en el 2023.
En la categoría de Senador nacional, después de 17 años consecutivos Carlos Reutemann no se postularía para renovar la banca. ¿Colgaría los guantes como lo hizo en 1982 con el automovilismo?. Ironía del destino: luego de una carrera política invicto, fue el actual Gobernador Perotti el que lo relegó al segundo lugar en las senatoriales nacionales del 2015. ¿Se retiraría con ese karma como en su carrera deportiva?.
Reutemann perdió precisamente cuando no jugó con la escudería PJ. Lo había hecho por el PRO, luego mudado a Cambiemos. En aquel momento, el peronismo había advertido que unidos podrían volver al Sillón del Brigadier; cosa que ocurriera 4 años más tarde, y con el propio Perotti de candidato.
El PRO 2015, devenido en Cambiemos 2019, al no contar más con el “candidato estelar” (Del Sel) quedó postergado el año pasado al tercer lugar con el voluntarioso José Corral de candidato a Gobernador.
*Granata: ¿la sucesora?*.
¿Quién ocupará la centralidad en el 2021 y/ó en el 2023 que supieron darle al PRO y Cambiemos, Carlos Reutemann y Miguel Del Sel?. Para no pocos analistas hay una sola persona: Amalia Granata.
Ahora bien, ¿qué dice Granata?. Oficialmente, nada; pero hay quienes especulan que no descartaría ser candidata a diputada nacional en 2021, con sus casi 300 mil votos obtenidos el año pasado en las legislativas provinciales. Allegados a la inescrutable diputada deslizan que, si la pandemia lo permite, a partir de septiembre y hasta fin de año, Amalia Granata recorrerá “dos veces las seis cabeceras de la provincia” para definir su suerte. “Esa ronda, más sondeos de opinión pública, dirimirán su suerte”, arriesgan a contar esos voceros oficiosos -no sabemos si con la anuncia de la involucrada- hasta el punto de señalar que esta vez prescindiría de los sectores religiosos que la secundaron el año pasado en la lista. Y en tren de alianzas, Granata mantendría vínculos estrechos con toda el ala “Cambiemos a la centro derecha”, al punto tal de mantener encuentros virtuales con López Murphy, Pichetto y Frigerio, entre otros referentes nacionales; “y también, para sorpresa de varios con una pata del Frente Progresista”, filtran.
*¿Javkin y Perotti adelantan el 2021?*
El columnista político rosarino Mauricio Maronna expone que con el acuerdo financiero arribado entre Omar Perotti y Pablo Javkin para refinanciar una deuda que el municipio rosarino tiene con la Provincia de Santa Fe, “amor con amor se paga”; léase, la gobernación le pedirá favores políticos al jefe de Creo. Más ahora cuando lo que necesita el peronismo es que el Frente Progresista no llegue unido a las elecciones, Todos lo desmentirán”, concluye el colega.
Allegados al Presidente de la Cámara de Diputados Miguel Lifschitz dudaron – irónicamente – que “Javkin quiera perder – de aliado – con el PJ”; ¿estamos ante una velada confesión de que el ex- Gobernador saldrá a la cancha el 2021 como candidato a Senador Nacional?. Recordemos que el propio Lifschitz le dijo a este Diario que él no necesita competir el año que viene para ser conocido de cara al 2023″.
Para un alto referente del FPCyS, Javkin no jugaría en contra del Frente que lo cobija; “además Liftchitz gana con o sin él (Javkin)”, desafió. De todos modos, se desconoce la postura del actual titular de la Cámara de Diputados que si no jugase a Senador nacional abriría la sucesión para Felipe Michlig, Maximiliano Pullaro dentro del FPCyS; mientras que José Corral y Federico Angelini tal vez deberían dirimir supremacía en las PASO de Juntos por el Cambio.
El siempre realista Rubén Galassi no ve en aquella movida más que una refinanciación de deuda entre el municipio de Rosario, “oxígeno importante en este momento; lo electoral está muy lejos y suele transcurrir por otros caminos. Javkin en el 2021 necesita que la lista de concejales propia gane, esa es la única realidad”.
En cambio, para un confidente del Gobernador Perotti, el socialismo está incómodo con la relación que mantiene el Partido Justicialista con el Primer Mandatario, “y hacen circular que el PJ juega a esconderse el año que viene, ya que no juega nada en el 2021”.
Perotti tendría un amortiguador para la senatorial del año que viene: es una elección nacional y posterior a las provinciales. El primer candidato a Senador nacional (¿Roberto Mirabella?) lo sería más del Presidente Fernández que del Gobernador.
*¿Terminó ahí lo del MPA rosarino?. Para Sain, no*.
El cimbronazo de la semana pasada en Rosario con el “affaire” de los fiscales rosarinos Patricio Serjal – nada menos que Fiscal Regional – y su subordinado Gustavo Alcides Ponce Asahad (detenido con prisión preventiva y suspendido en sus funciones por la Legislatura), acusados de cobrar coimas y filtrar información sensible a bandas delictivas, entre ellos al empresario de juego ilegal Leonardo Peiti, quien precisamente fue quien los delató tras haber sido detenido.
Tras los hechos, estalló el pánico cuando se advirtieron contactos – uno de ellos en plena audiencia imputativa a uno de los fiscales en los tribunales de Rosario – lealtades y padrinazgos entre los corruptos funcionarios públicos y ciertos actores de la clase política.
¿Quedó circunscripta la onda expansiva?. El indócil Ministro de Seguridad Marcelo Saín volvió a la carga con su discurso: “esto recién empieza, no termina acá; desde el comienzo del gobierno de Omar Perotti dijimos que veníamos a dejar atrás una época donde la seguridad se gobernaba generalmente a través de pactos espurios y contubernios entre la política, la Justicia y la policía con el mundo criminal”.
*Agosto viene con bono.*
Habría que ver si podría hacer mella en el capital político– en consolidación- de Perotti, el rechazado bono de tres mil pesos en concepto de aumento para los “empleados públicos” ($2.400 para los pasivos); lo que para una fuente que siguiera al detalle los números salariales por más de una década significará para las arcas públicas 710 millones de pesos; y 640 millones si a los docentes no les da una suma por cargo, sino con el límite de un cargo.
¿Apuesta el gobierno a que el personal con sueldos bajos y achatados sea personal dócil para el mando del funcionario, ya que por una subrogancia o un suplemento, ó viáticos generosos trabajría full time?. ¿O por el contrario tendría al lado a una persona con resentimientos y deseos de revancha?.
*La producción pide pista para despegar tras la pandemia*.
Mientras tanto, el Ministro de la Producción Daniel Costamagna no quiere que se pierda de vista que en plena pandemia, su cartera no para de promover y ayudar al sector productivo, a tal punto que este miércoles facilitará una reunión informativa del programa Construyendo Industria con más de 40 fabricantes de naves industriales de toda la provincia (de las cuales ya confirmaron 22) y el viernes se producirá el lanzamiento entre los centros tecnológicos del programa de Industria 4.0, que ya tiene forma y financiamiento, a tal punto que el Banco de Santa Fe destinará 5 millones en concepto de crédito fiscal para apoyarlo.
En definitiva; no es necesario que la política y la gestión se disocien. El “bien común” las necesita juntas.