Por Dario Schueri.
La cúpula del Partido Socialista posó para la foto el pasado viernes, luego de que el ex gobernador de Santa Fe presentara un escrito ante el Fiscal General de la Provincia, Dr. Jorge Baclini, ante lo que consideró una reiterada campaña de calumnias y difamaciones por “las numerosas manifestaciones, publicaciones y campañas en redes sociales, que desde hace tiempo y de manera sistemática apuntan a asociar a mi persona, al partido que integro y a los frentes que hemos integrado, con uno de los peores flagelos, como es el narcotráfico”.
Ese acto ocurría tan solo 24 horas después que en la Cámara de Diputados el radicalismo Neo-Evolución denunciara públicamente a “sectores del socialismo”, haber amañado con el peronismo no menos de ocho pliegos de aspirantes a cubrir Juzgados Comunitarios de Pequeñas Causas, generando un duro comunicado del Partido Socialista mediante el cual negaron “rotundamente la existencia de cualquier tipo de acuerdo” (con el peronismo) para designar jueces propios; a la vez que se comprometen a analizar los pliegos de los aspirantes. “No vamos a permitir ni tolerar falsas acusaciones, extorsiones ni aprietes públicos propios de una forma de hacer política que no compartimos ni aceptamos”, sentenciaron.
La Mesa Provincial de Juntos por el Cambio solo se limitó a recriminarle a “parte de los legisladores socialistas”, que “se rehusaron a interpelar a la Ministra Celia Arena y al Secretario de Justicia Gabriel Somaglia”, dejando (junto a diputados de otros Partidos, incluso de la propia Mesa) la sesión sin quórum.
Comunicado, presentación ante el MPA y foto grupal. Todo en uno. El mensaje del PS a la comunidad política pareciera ser: “o todos arreglamos con el peronismo, ó no arregló nadie”.
Desde el jueves el radicalismo Neo-Evolución no emitió mas opinión, pero en el sector susurraron en estricto “off”: “vamos a ver cuando toque la campana de la Asamblea Legislativa (que no tiene fecha aun) quienes van a entrar a votar esos pliegos, donde el que salió 10 aparece primero”.
El correligionario Julián Galdeano le quitó dramatismo a la situación en un reportaje concedido al Diario El Litoral de esta capital, advirtiendo que “todos” los sectores dialogan con el gobierno, antes de que un mensaje sea enviado a la Legislatura”; agregando que “esta escalada de acusaciones y de declaraciones, no ayuda en particular a tratar los pliegos enviados después de mucho tiempo a la Legislatura (…) Mucho menos ayuda para la posibilidad de unidad de la oposición”.
Recordemos que el titular de la UCR Felipe Michlig había pedido en declaraciones a nuestro Diario, “no mezclar lo legislativo con lo político; y si queremos hacer la cosas distintas a como las hace el peronismo de Omar Perotti, tenemos que buscar otro camino, que estamos proponiendo incluso con el socialismo trabajando juntos”.
Dudamos que el PS se vuelva a expresar sobre la cuestión (sobremanera cuando esta semana no hay sesión); mientras algunos socios de Juntos por el Cambio imaginan la cohesión socialista como una señal inequívoca de supuestas intencionalidades emancipadoras de un abstracto “frente de frentes”.
Cualquier observador político que conozca al socialismo y su organización funcional advertiría que, pese a ser ateos en su mayoría, copian a la Iglesia Católica (salvando los siglos y todas las escalas): “los debates los damos adentro”, pontifican.