El próximo miércoles vencen $547.042 millones de Lebac(más del 58,3% del stock total en circulación). Debido al feriado de mañana, el BCRA realizará hoy la licitación mensual bajo el desafío de renovar la mayor cantidad posible de estos vencimientos y simultáneamente ajustar los rendimientos a los últimos datos inflacionarios y del mercado financiero.#
Cabe recordar que en la anterior licitación, la tasa más corta -a 35 días- se estableció en un 25,5% anual. En dicha ocasión los vencimientos fueron $476.181 millones y las propuestas sumaron $459.486 millones. La semana pasada, además, en la reunión del Comité de Política Monetaria, el BCRA optó por mantener sin cambios su tasa de política -del centro del corredor de pases- en el 26,25%, a la espera de más señales que indiquen una consolidación del proceso de desinflación. Al respecto vale destacar que los últimos datos de los precios mayoristas (que parecen más alineados con las metas del BCRA: crecen al 15,3% anual) y de los costos de la construcción brindaron nuevos indicios de desaceleración de la inflación. Sin embargo, el BCRA, luego del tropiezo de marzo -cuando se confió con la inflación y decidió bajar la tasa de la Lebac corta del 22,75% al 22,25%- parecería que prefiere mantener la cautela. No debe soslayarse que tras el error de marzo luego lo remendó en las licitaciones de abril y mayo cuando subió la tasa al 24,25% y al 25,5% respectivamente, al son de los sorpresivos datos inflacionarios de marzo (2,4%) y abril (2,6%). En aras de construir credibilidad, sobre todo para convencer a los agentes económicos del dogma de las metas de inflación, el BCRA sabe que cada paso en falso le cuesta mucho más que cualquier acierto.
Por eso, los analistas toman distancia sobre los próximos pasos del BCRA, donde la virulencia de las presiones políticas y corporativas para bajar las tasas han disminuido de cara a las próximas elecciones de octubre. Los inversores tienen claro que el mercado secundario de las Lebac es el termómetro a monitorear como proxy de la licitación del BCRA, sobre todo, después del cambio de la tasa de referencia por la del corredor de pases. En tal sentido, en las últimas semanas las tasas en el mercado secundario empezaron a mostrar una tendencia bajista, donde la tasa de la letra más corta -que vence a mediados de julio,a 33 días- se negoció por debajo del 25,5% (última licitación) en torno del 25,35%/25,30%. Para los "creyentes" del mercado secundario esto sería una pista preliminar de que el BCRA estaría sesgado a dar un nuevo volantazo en la dirección en que conduciría a las tasas de las Lebac, en tanto y en cuanto, confíe en la desaceleración de la inflación. Sería lógico, en virtud de las idas y contramarchas al comenzar con las metas de inflación, que el BCRA se mantenga a la espera de conocer, por lo menos, los datos de junio. Mientras tanto el sistema financiero fue recuperando liquidez, en un mes estacionalmente complicado, vía la cancelación de Pases Pasivos. En la primera quincena el BCRA liberó por este canal cerca de $58.000 millones. Aunque por la vía de las Lebac absorbió del mercado casi $64.000 millones.
Hay un dato a tener en cuenta, como advierte el economista Fausto Spotorno, de OJF: se trata del impacto de la exención del impuesto sobre los Ingresos Brutos a los ingresos provenientes de los Pases Pasivos en CABA. La alícuota era del 7% por lo que el tributo implicaba un 1,8% sobre el rendimiento que obtenían los bancos al colocar liquidez en Pases. La tasa de Pases está en el 25,5% por lo que rendía el 23,70%. Ahora se eleva al 25,5%, o sea, en el mismo nivel que la última licitación de Lebac En función a las últimas operaciones en el secundario estaría todo ya arbitrado, por lo que daría que pensar que el BCRA optaría por defender su "credibilidad" y mantener la tasa.
Fuente: otrosambitos.com.ar