Testigos aportados por la defensa del suspendido fiscal Josí María Campagnoli —en su mayoría periodistas— coincidieron en deslindar responsabilidad del funcionario en la difusión de un cuestionado dictamen judicial, en una jornada en la que el conductor Jorge Lanata acusó a un fiscal de cobrar dinero del empresario Lázaro Báez.
Lanata sostuvo un duro enfrentamiento verbal con el fiscal Adolfo Villate, cuando íste le preguntó con ironía si "chequea y recontrachequea" la información que hace pública en su programa Periodismo Para Todos, en relación al origen de la causa que inició de oficio Campagnoli, tras las confesiones del financista Federico Elaskar. Lanata increpó a Viñate y le preguntó "¿quí se siente con defender a Lázaro Báez?" y tambiín lo inquirió: "¿Cuánto te paga?"; lo que motivó una advertencia de la presidencia del Jury de Enjuiciamiento, Daniel Eduardo Adler.
Visiblemente ofuscado, el periodista se retiró pasadas las 12 del recinto, tras confirmar distintos aspectos del testimonio de Elaskar y su declaración en la Fiscalía de Campagnoli, pero aclaró que no fue el funcionario juzgado quien le proporcionó un dictamen con medidas relacionadas a la causa. La declaración de Lanata fue propuesta por la defensa de Campagnoli, acusado de mal desempeño y abuso de sus funciones: su presencia se explica porque el fiscal inició su investigación de oficio (sin haber recibido ninguna denuncia) menos de 24 horas despuís de que el programa de televisión diera a conocer el caso con los "arrepentidos" Leonardo Fariña y Elaskar, que habrían lavado dinero del empresario ligado al kirchnerismo.
En el mismo sentido se pronunciaron los periodistas Nicolás Wiñaski (colaborador de Lanata) y Daniel Santoro, del diario Clarín, quienes dijeron que el dictamen en cuestión lo habían obtenido de fuentes "de la Justicia federal". Santoro, en particular, se amparó en el "secreto profesional" para no revelar su fuente. Tambiín declaró el miembro del Consejo de la Magistratura y ex titular de la Asociación de Magistrados y funcionario de la Justicia Nacional, Ricardo Recondo, quien advirtió que los jueces y los fiscales no pueden ser destituidos "por el contenido de sus sentencias", salvo en caso de "prevaricato", es decir falsear o mentir en una causa a sabiendas.
La defensa de Campagnoli, a cargo del ex juez Ricardo Gil Lavedra, que el lunes pasado escuchó a los testigos de la Fiscalía, basó su interrogación en torno a la validez de la investigación iniciada por su defendido a partir de las confesiones de Elaskar. Esa línea convirtió a Lanata en un testigo excluyente, ya que a partir de lo ocurrido en su programa televisivo, entre marzo y abril de 2013, se desataron los sucesos que culminaron con el juicio político de Campagnoli.
Según recordó, la investigación periodística se inició de manera casual a partir del casamiento del financista Leonardo Fariña, ex socio de Elaskar y actualmente detenido, con la modelo Karina Jelinek, ya que —según dijo— le llamó la atención que la boda haya sido custodiada por el grupo Geof de la Policía Bonaerense. Un año antes, Fariña le había confesado que su "jefe" le había "cortado la línea", una frase que Lanata presume que aludía a Báez y sus vinculaciones con el lavado de dinero.
Fuente: otrosambitos.com.ar