Resulta cuanto menos perturbador describir la política nativa despuís de estar horas frente al televisor escuchando los ejemplares discursos divinamente humanos y políticamente aleccionadores del Papa Francisco en las Jornadas Mundiales de la Juventud de Río de Janeiro, a la cual las diócesis santafesinas le aportaron miles de jóvenes entusiastas y comprometidos, que seguramente regresarán aún mas convencidos de que, como diera el creador de la JMJ Juan Pablo II, “vale la pena dedicarse a la causa de Cristo”.
El sucesor de Pedro se mostró en Brasil “políticamente incorrecto” y seguramente utilizó los generosos atriles y el sobrecogedor fervor popular no solo para mostrarle el camino a los centenares de miles de jóvenes de todo el mundo que peregrinaron hacia Rio, sino para enviarle, no tal sutilmente, claros mensajes a la atildada Curia Romana que intenta transformar, y para lo cual, según describió unos de sus biógrafos, deberá llevar a cabo en los próximos cuatro años.
Dichos y ejemplos de Francisco que cementan la sustancia de una revolucionaria política eclesiástica que acompaña los tiempos modernos (internet incluida) sin resignar la doctrina evangílica; faena encarada –aunque nadie lo advierta – por su antecesor Benedicto XVI, que dio el paso trascendente hacia la continuidad con su trascendente abdicación (que en algunas ocasiones es sinónimo de retroceso) que le abrió las puertas al El Elegido “in píctore” Cardenal Jorge Bergoglio.
Que Francisco les pida a los jóvenes que “hagan lío” y saquen la Iglesia a la calle no significa que aprobará el aborto, la liberalización del consumo de drogas (eje de sus homilías), el sacerdocio para las mujeres, el fin del celibato, o el matrimonio religioso entre personas del mismo sexo. Que nadie se confunda; la “franciscomanía” no quitará lo esencial de la doctrina.
La maravillosa enajenación espiritual que genera la espontánea, descontracturada y fresca presencia de Francisco en cada aparición en Río de Janeiro no es señal de flexibilización de los dogmas de la Iglesia basados en las Sagradas Escrituras, cuyo Antiguo Testamento no fue reemplazado por el Nuevo Testamento y los Santos Evangelios; todo lo contrario.
Así las cosas, por estas latitudes los políticos se disponen a encarar las últimas dos semanas de campaña para las decisivas PASO del domingo 11 de agosto, embraveciendo sus discursos como en el caso del radical Fabián Oliver hacia su correligionario Barletta y de refilón para Hermes Binner en la interna del FPCyS; y Jorge Obeid que cada día envenena un poco mas sus dardos hacia el gobierno socialista de Bonfatti, apuntando decididamente hacia un plebiscito de gestiones para tratar de ganar posiciones que lo acerquen al primer lugar en las encuestas.
Del Sel y Binner optan por centrar sus discursos proselitistas en contra del verdadero adversario en las urnas: el modelo nacional; mientras “Cachi” Martínez con su candidato Raúl Carignano a cuestas, mixtura un poco de cada cosa: las críticas hacia el gobierno socialista y la necesidad de representar genuinamente los intereses de la Provincia en la Cámara de Diputados que ya integra, aspirando a ampliar la representación para tener un mayor margen de maniobra y negociación con el gobierno K del cual se mantiene prudentemente equidistante.
Cumplir o no cumplir con la Ley. Dicen que el oportuno llamado del Jefe de Gabinete de Ministros Juan Manuel Abal Medina postergó hasta el 15 de agosto (estratígicamente despuís de las primarias) el desatinado debate sobre quiín deberá ocupar la banca de la extinta diputada Silvia De Císaris: si quien, como indica la Ley Julio Roberto López que sigue en el orden de suplencias en el Frente Santa Fe Para Todos, ò Mariana Robustelli, interpretándose la necesidad del derecho al cupo femenino.
Lo cierto es que este tema vuelve a ahondar la albano-kosovización que existe en el peronismo parlamentario (en Senadores no van en zaga) y abrió tambiín algunas brechas en el FPCyS algunos de cuyos miembros inclinaban su voto hacia la joven Robustelli.
Finalmente el Poder Ejecutivo financiará en octubre la campaña electoral de los candidatos a concejales en las 51 ciudades y 9 intendentes, tras la reunión entre el Ministro Galassi y el Presidente de la Cámara de Diputados Luis Rubeo cuando la sangre amenazaba con llegar al Río. Los millones que hagan falta para ese democrático cometido surgirán de una ampliación de partida para Comunicación Social.
Todo indica que en estos últimos 15 días de campaña, las diatribas mutuas entre los candidatos seguirán reemplazando el discurso de iniciativas para, en este caso desde el Congreso, defender los intereses de la Provincia de Santa Fe y sus habitantes.
Fuente: otrosambitos.com.ar