La jefatura del Comando Unificado de las Fuerzas federales de Rosario reconoció que, en base a los datos que arroja el mapa del delito, se decidió el traslado de efectivos de Gendarmería Nacional desde el macrocentro hacia los barrios más conflictivos como Empalme Graneros, Parque Casas, Ludueña, 7 de Septiembre y en Villa Gobernador Gálvez, donde se concentraron en este último tiempo la mayor cantidad hechos criminales. Desde el Ministerio de Seguridad de la Nación observan “con preocupación” lo que ocurre en Rosario.
Desde hace unos 20 días cambió la postal de despliegue de las fuerzas de seguridad en la zona del macrocentro rosarino. Donde hasta hace un mes era habitual ver hasta tres gendarmes por cuadra en el bulevar Oroño o las avenidas del primer anillo urbano, ahora se despliegan policías de la provincia de Santa Fe con tareas disuasivas y de prevención.