Guillermo Laborda y las medidas de Lousteau

El jefe de Economía de Ambito Financiero analiza las medidas que el gobierno apunta a introducir importantes modificaciones en la economía La intención es reforzar el superávit fiscal y aminorar la fuerte aceleración de los precios observada en los primeros tres meses del año (aunque no se la reconozca). De base, Cristina de Kirchner es consciente de que no hay más margen para aumentar la presión impositiva y lo ocurrido con las retenciones dan prueba de ello. Por ello es que se comenzará a trabajar por el lado del gasto, para cumplir con la meta de cerrar 2008 con un ahorro primario del $ 35.000 millones. ¿Cuánto? La intención es que para diciembre de 2008 estí creciendo a 24% interanual frente al casi 40% actual.

Pero hay otras cuestiones que versan sobre subsidios, precios, y finanzas en un contexto internacional que se presenta ya menos favorable, algo de los que ya comienzan a considerar seriamente en la Casa de Gobierno. Son estos puntos:

# El gasto público por la serie de subsidios lanzados en diferentes sectores tiene un alto componente variable en función del fueloil por ejemplo, o de los commodities. Ya está decidido -este diario lo adelantó- el aumento de las tarifas de electricidad, lo que permitirá reducir el monto de subsidios que se otorgan. Ello siempre estará concentrado en los sectores de más elevados ingresos, según confesaron fuentes del Ministerio de Planificación.

# Esto incluso podría tener un impacto indirecto en la inflación. Es que con tasas de ahorro tan bajas, 9% máximo en un plazo fijo en pesos, los sectores de elevados ingresos en lugar de ahorrar se lanzan a consumir más. La visión oficial es que se desactivaría este ingrediente con la recomposición tarifaria. Tambiín con un alta de lo que hoy se paga por los plazos fijos, tarea por delante para el Banco Central. Si bien la política monetaria se escuda en que subir tasas -en un mercado poco bancarizado- no tiene mayor impacto, se le puede observar que tasas tan bajas para depósitos, disparan consumo y precios. La de los críditos es otra cuestión muy diferente, con empresas que postergan financiarse por la mayor incertidumbre que perciben.

# En lo que respecta al financiamiento, otro de las cuestiones a seguir de cerca por cuanto sucede en EE.UU., ya es sabida la decisión de realizar canjes de la deuda para aliviar vencimientos de 2009 a 2011.

Pero será en etapas en lugar de hacerlo en una sola transacción, abarcando en cada una de ellas, diferentes emisiones a las que buscará retirar de la plaza. Lo más atractivo pasa por los prístamos garantizados con vencimientos por $ 4.515 millones este año y $ 12.500 millones en el próximo. Habría cuatro «minicanjes». Para la semana próximase anunciaría una nueva emisión de BONAR 13 en pesos.

# La inflación en los alimentos siguen siendo la preocupación central, algo que está incluido en las actuales negociaciones con el campo. Es la batalla, utilizando tírminos de Cristina de Kirchner, más relevante por delante y la de más difícil resolución. Pero la cuestión aquí es la diversidad de opiniones en el propio gobierno, desde Martín Lousteau, a Guillermo Moreno con escala previa en Puerto Madero. Más allá de ser un virus expandido en todo el mundo, las reacciones sobre el alza de los alimentos caerán sobre quienes estín a cargo. Como en lo que respecta a la crisis energítica, aquí las soluciones no son inmediatas porque los aumentos en la producción no son posibles de corto plazo por más que, milagro mediante, el gobierno opte por cambiar drásticamente la política de incentivos.

Fuente: otrosambitos.com.ar