Gobierno recorta subsidios: subirá hasta 400% el agua y 280% el gas

El Gobierno anunció que a partir de abril reducirá, en tres etapas, entre un 17 y 80 % los subsidios que hoy se aplican a las tarifas de gas y de agua para los consumidores residenciales, los comercios y los usuarios de GNC.

La información fue brindada por los ministros de Economía, Axel Kicillof, y de Planificación, Julio De Vido en el marco de lo que se definió como "la puesta en marcha de un Programa de Reasignación de Subsidios y de Consumo Responsable para los servicios de gas natural y agua potable que beneficiará a los sectores de menores recursos y fomentará la competitividad de la industria", según enfatizó el titular del palacio de Hacienda.

Kicillof reivindicó la política de subsidios que en el terreno de los servicios públicos "ha sostenido desde 2003 y seguirá llevando adelante este Gobierno", aseveró.

La decisión oficial apunta a que el ahorro que se logre por esta reducción (entre 5.000 y 15.000 mil millones de pesos anuales) sean destinados para reforzar las partidas de la Asignación Universal por Hijo y del Plan Progresar.

El ministro recordó que Asignación Universal por Hijo y Progresar son "dos políticas de estado fundamentales que impulsó este Gobierno" y señaló que "por eso es un redireccionamiento, puesto que los subsidios se distribuyen con un claro sentido de justicia social". En línea recordó la importancia del programa de asistencia a jóvenes de entre 18 y 24 años que es, precisamente, "el sector más complejo a la hora de la inserción laboral, con las mayores tasas de desempleo en el mundo para esa franja etaria".

Asimismo, las autoridades buscan generar un consumo "responsable" y por esta razón es que aquellos usuarios que comiencen a cuidar el consumo de gas y agua serán "premiados" con el mantenimiento de la ayuda estatal.

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Las resoluciones oficiales se inscriben en el marco de una reconsideración general de los cuadros tarifarios. Se comenzó por el gas y el agua porque se trata de servicios menos complejos para rever desde el punto de vista tarifario, que los correspondientes a energía.

En el caso de la luz son siete las distribuidoras; las tarifas son más diversas y es más complicado ubicar los niveles de usuarios por poder adquisitivo, señalan en fuentes oficiales. De ahí que las quita de subsidios se llevará a cabo pero "en una próxima etapa".

El incremento que se terminará pagando por el gas en los hogares será de entre el 100% y 284% y en las facturas de agua ese aumento va del 270% al 406%.

Pero si el usuario en el bimestre abril-mayo de este año consume un 20% menos que el mismo bimestre del 2013 continuará pagando el mismo importe. A modo de ejemplo, si un hogar R3-1 (este dato figura en la factura de gas) pagó en el último bimestre $ 77, pasará a pagar $ 227, es decir un 194% más, pero si ahorra 20% en el consumo comparando con el mismo bimestre del año anterior seguirá pagando lo mismo que siempre.

En el caso del Gas, el aumento promedio en las tarifas será del 230% en total, donde para los residentes de menor consumo las tarifas aumentan un 100%, mientras que los de mayor consumo el incremento alcanza un máximo de 284%.

La factura promedio bimensual pasará de $95 en la actualidad, a un total de $313 para el mes de agosto (+230%), sostiene en un informe la consultora Econometrita en base a los datos oficiales conocidos este jueves.

En relación a las facturas de agua el promedio pasará de $25 en la actualidad, a $66 pesos para el mes de agosto, es decir una suba en promedio de 165%. El rango de aumento varía entre 70% para los de bajo consumo, y supera el 300% para los de mayor consumo, continúa explicando Economítrica.

Desde el Gobierno rechazan públicamente la necesidad de bajar el gasto público e insisten que los fondos que se obtenga por la eliminación parcial de subsidios serán redireccionados a gastos social.

No obstante, si por el aumento de tarifas se logrará que la población disminuya el consumo de gas, el Estado se verá beneficiado en un ahorro de divisas por la importación del fluido. En tal sentido, se comenzará una campaña de difusión de medidas para alentar el ahorro del consumo energítico (ver vinculado).

• Excluidos

De la quita de subsidios están excluidos numerosos sectores como los jubilados o pensionados que perciban la mínima; todos aquellos que reciban algún programa asistencial, o el listado de aquellos que ya sufrieron la quita de subsidios. Tambiín se habilitarán los números 0800-222-9500, 0800-333-444 y 0800 333 0200 para aquellos que consideren que no pueden pagar los nuevos valores.

Las industrias fueron excluidas y esto obedece, según la lógica del Gobierno, a la necesidad de no afectar al crecimiento de la economía como asimismo que los sectores no pierdan competitividad, aunque como advirtió Kicillof "los subsidios se perderán si se aumentan injustificadamente los precios". La decisión recibió el beneplácito de las industrias intensivas en el uso de gas y agua, como el caso de las petroquímicas. En este sentido, la presidente Cristina de Kirchner, a travís de la cadena nacional defendió la iniciativa al remarcar que los subsidios a los sectores industriales representa "unos 10 mil millones de pesos casi lo mismo que los subsidios domiciliarios" que ahora se reducen.

En todo momento, Kicillof al igual que De Vido se ocuparon de enfatizar que la "política de subsidios continuará" ya que beneficia "a la economía al incrementar la demanda y mejorar los costos de la producción" y fue "lo que permitió que la Argentina creciera a los niveles que lo hizo en los últimos años".

Por su parte, Kicillof argumentó que esta eliminación de subsidios "no es una política de ajuste" y que no se lleva a cabo por "necesidades de caja". Es más, en un tono enírgico advirtió: "Los que piden el ajuste se han equivocado de Gobierno".

Sin embargo, algunos especialistas enmarcaron esta decisión junto con la de rever el dato del crecimiento del PBI a una tasa del 3% lo que evitaría que Argentina pague hacia fin de año unos 3.000 millones de dólares como las medidas necesarias que se esperaban luego de la devaluación y la suba de tasas. "Aunque no lo quieran llamar ajuste son las medidas que una gran mayoría de especialistas venían reclamando", aseguran.

Fuente: otrosambitos.com.ar