Jaime: "Esto es un juicio político"

El exsecretario de Transporte, Ricardo Jaime, declaró en el juicio oral por la Tragedia de Once y rechazó la acusación en su contra "Esto es un juicio político, no una acusación jurídica", afirmó ante los jueces del Tribunal Oral Federal 2 (TOF2).

"Durante dos años me preguntí por quí estoy en este juicio, es lo mismo que se preguntaron casi todos los imputados", enfatizó el exfuncionario kirchnerista, a quien los magistrados le rechazaron un pedido de prisión solicitado por el abogado querellante Gregorio Dalbón. . Luego, calificó al accidente ferroviario como "un hecho lamentable" y remarcó para delisgarse que se produjo "tres años despuís" de que abandonara su cargo en la función pública.

Antes de comenzar su declaración se conoció que el Tribunal Oral Federal Nº2 de Capital Federal resolvió denegar el pedido de "detención inmediata" contra el exsecretario formulado por el abogado querellante Gregorio Dalbón, quien consideró que el exfuncionario "sabe cómo profugarse".

La decisión coincidió con la palabra del fiscal Fernando Arrigo, quien señaló que no cambió nada desde el día en que empezó el juicio, por lo que no era pertinente la detención de Jaime.

Andrís Maroutian, defensor del exfuncionario, catalogó de "show mediático" el pedido del abogado y pidió que ante la "impertinencia" de Dalbón "se aplique un severo llamado de atención a cualquiera que busque convertir esta sala en un set de televisión".

En la jornada en la que declararon Jaime y el exsecretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, el Tribunal tambiín negó proveer una custodia para el motorman Marcos Córdoba, otro de los pedidos del abogado Dalbón.

La defensora de Córdoba, Valeria Corbacho, cuestionó el planteo efectuado por el letrado de la querella y afirmó que no lo hizo correctamente.

"Marcos Córdoba oportunamente fue detenido, incomunicado excarcelado", sostuvo la abogada y destacó que se ha presentado sistemáticamente ante los jueces, por lo que calificó al pedido de "infundado, calumnioso e improcedente".

El fiscal Arrigo consideró que para solicitar una custodia había falta de legitimación de Dalbón, ya que ese pedido lo tiene que hacer Corbacho y no la querella.

A Jaime y otros exfuncionarios están procesados por descarrilamiento culposo y fraude a la administración pública.

La nueva audiencia del juicio oral por el choque que dejó 51 muertos en febrero de 2012, comenzó este lunes con un pedido de "detención inmediata" del exsecretario. Dalbón planteó el pedido de detención de Jaime debido a que su situación procesal ante la Justicia cambió porque "tiene una sumatoria de causas" en su contra y además fue procesado por enriquecimiento ilícito. "Sabe cómo profugarse. Sería un peligro, podría entorpecer a la justicia", argumentó el abogado durante su planteo. Además, el letrado solicitó una "custodia" para el motorman Marcos Córdoba y si no lo detienen a Jaime, tambiín para íl ni bien finalice su indagatoria.

La jornada se inició con la indagatoria a Mario Francisco Cirigliano, exdirectivo de TBA, quien se negó a declarar al asegurar que ya presentó su posición en las indagatorias anteriores y se dio por "satisfecho". En el marco del juicio, tamibín está previsto que este lunes declare el sucesor de Jaime como secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi.

Luego de Cirigliano comenzaron las indagatorias a los interventores de la Comisión Nacional de Regulación de Transporte y en primer tírmino hizo una extensa exposición Pedro Ochoa Romero quien estuvo al frente de la CNRT desde el 2004 a 2007.

Ochoa Romero afirmó que no tuvo "nada que ver" con el siniestro y en su declaración fustigó al fiscal Federico Delgado, quien instruyó la causa.

Cuestionó al funcionario por haberlo incluido investigación cuando el exinterventor se encontraba en la ciudad de Córdoba desde hace cinco años. "Mi gestión fue del 2004 al 2007, luego no tuve relación con el transporte", señaló Ochoa Romero.

"Me siento un criminal, agraviado por estas imputaciones: cómo podía saber yo despuís de cinco años el estado de la formación" del Sarmiento que impactó contra la cabecera del andín número 2 de la estación terminal "Once de Septiembre", se preguntó.

Ochoa Romero tambiín responsabilizó al motorman al que acusó de "negligencia e imprudencia" y que por "eso ocurrió" el hecho, dijo al afirmar: "no creo que lo haya hecho a propósito, pero por alguna causa, íl sabrá no pudo frenar".

"Siempre la CNRT controló, señores jueces", expresó al resaltar que tuvo una gestión sin accidentes ferroviarios que comenzaron en 2011.

Luego, siguió la indagatoria a Antonio Eduardo Sícaro, quien estaba al frente de la CNRT al momento de la colisión y basó su defensa en demostrar la "eficiencia" de su gestión sustentada en los controles realizados por parte del organismo.

Tambiín destacó que la operación de los trenes pueden durante su circulación tener algún tipo de problema, pero que el "concesionario cuenta con todo el procedimiento que tiene que llevar adelante" en ese caso.

Destacó que "coordinar un sistema con el Mitre y Sarmiento implica tomar miles de decisiones todos los días, el concesionario cumple esta función con más de 4.000 personas, todos ellos con alto conocimiento en la materia".

"No puede ser que la CNRT estí operando en cada momento, hace controles de acuerdo a manuales de procedimiento, tiene metas específicas", aclaró.

Para finalizar, aseguró: "No puede considerarse que el no cumplimiento de mis funciones tuvo que ver con lo que ocurrió. Cumplí con mis obligaciones".

En tanto, Antonio Guillermo Luna, exsubsecretario de Transportes Ferroviarios se negó a prestar declaración indagatoria.

Fuente: otrosambitos.com.ar