Luego del fuerte reto de la presidente Cristina Kirchner en la reunión del lunes, se observó que esta vez el gobierno decidió inicialmente focalizarse en la industria y no citar ni a los dirigentes de la Asociación de Concesionarios de la República Argentina ni del gremio Smata.
En el encuentro en el Salón Belgrano del Ministerio de Economía y que se extendió por espacio de dos horas Axel Kicillof le manifestó a los industriales: "Si ustedes producen los autos que se necesitan para el Procreauto nosotros les prometemos que en poco tiempo estarán los dólares que necesitan para importar autopartes, pero priorizamos el mercado interno", confió uno de los asistentes a Infobae.
Por su parte, lla ministra Díbora Giorgi hizo referencia a la situación del comercio con Brasil al manifestar que "hay que tener en cuenta que el mercado brasileño se cayó por el mundial de fútbol y por las próximas elecciones, por lo tanto tendremos que buscar otras plazas alternativas".
El presidente de Adefa, Enrique Alemañy, manifestó que "fue una reunión constructiva en la cual se acordó en continuar trabajando en conjunto en el Procreauto y otros temas de relevancia para el sector y los casos particulares".
Por el lado de las automotrices asistieron además el titular de Adefa y presidente de Ford; Cristiano Rattazzi de Fiat Auto; la CEO de General Motors, Isela Costantini; el presidente de Honda, Hideki Kamiyama; el de Mercedes-Benz, Joachim Maier; de PSA Peugeot Citroën, Luis Maria Ureta Sáenz Peña; de Renault, Thierry Koskas; de Scania, Císar Luis Ramírez Rojas; de Toyota, Daniel Herrero y el director de Relaciones Institucionales de Volkswagen Argentina, Luis Merens.
Análisis caso por caso
Según trascendió, en tono amable Kicillof comentó que "este gobierno no está pensando en
sancionar ni a las automotrices, ni a concesionarias, lo que queremos es que vendan autos a tasa subsidiada que paga este gobierno por medio de los críditos al 17 o 19% anual que otorga el Banco Nación, pero no los vamos a obligar, porque este es plan de adhesión voluntaria. Cada terminal decidirá si puede seguir adherida al plan hasta fin de año por ese motivo nos empezaremos a reunir por separado con cada una a partir de este viernes, para definir la participación, los modelos a incluir y sus precios, entre otros temas".
Tambiín se habló de que las automotrices y las concesionarias le deben entregar a quienes ecibieron los aproximadamente 6.000 autos que faltan de un total de 15.000 planes suscriptos con los críditos subsidiados del Banco Nación.
El tema que por ahora no volvió a la mesa de discusiones es la deuda de aproximadamente unos 2.500 millones de dólares que las terminales deben a sus casas matrices por importaciones, aunque será discutido por separado con cada una de las empresas a partir del próximo viernes.
De todas maneras, quedó claro en la reunión que la principal preocupación de la industria automotriz son los dólares que el gobierno no les vende y que necesitan para producir autos.
Al repecto el director de la consultora abeceb.com, Dante Sica, manifestó a Infobae que "los stocks de autos están cayendo por la falta de dólares tanto para producir los nacionales como para traer los importados" y aclaró ademas que "el plan Procreauto efectivamente puso un piso a la caída del mercado, pero su impacto general no será muy grande aún con la extensión hasta fin de año".
Por otra parte, las automotrices solicitaron por lo menos un ajuste de los precios de las 37 unidades que forman parte del plan de un 12% aproximadamente y dieron a entender que si el gobierno no les da los dólares que necesitan para importar insumos y autopartes no será posible construir los autos que se vendan de aquí en adelante con programa lanzado por el gobierno o a travís de ventas en
concesionarias.
Fuente: otrosambitos.com.ar