Malvinas: por ahora no se habla de soberanía con Gran Bretaña

En ese cruce el entusiasmo, ya sea que haya sucedido así o que fuera un exceso en el relato de la anécdota, le jugó una mala pasada a Macri.#

"En el almuerzo nos cruzamos con la primer ministro británica. Le dije que estoy listo para comenzar un dialogo abierto, que incluya por supuesto el tema de la soberanía", dijo Macri dando con eso una señal también hacia la Argentina donde tanto oposición como el propio oficialismo le vienen reclamando explicaciones sobre el acuerdo por vuelos y petróleo que comenzó a cerrar Susana Malcorra con la cancillería de Londres para saber si incluye alguna cesión de posiciones para el país.

Con ese refuerzo de estrategia claramente a la vista, Macri continuó: "Ella dijo que si, que habría que empezar a dialogar. Estas cosas llevarán años pero es importante que comencemos. Ella se acercó a saludar a mi mesa. Estaba en la mesa de al lado", relató Macri.

De hecho cuando el presidente habló sobre la declaración conjunta que firmaron ambos países, Macri aclaró que la soberanía sobre Malvinas había sido un requisito de la Argentina.

Error

Esta claro que la única forma de interpretar que la premier May hubiera aceptado comunicarle a la Argentina semejante decisión histórica sobre la soberanía en Malvinas es porque hubo un error por parte de Macri en su inexperiencia en estas lides. Ninguna mente experta en materia diplomática podría avalar que ese tema se discutiera en esa situación entre mesas en medio de un almuerzo. Esta claro que cuando Macri relata la disponibilidad a dialogar, May le acepta en terminos generales, sin pararse sobre la cuestión soberanía.

La realidad es que la infor-mación que comenzó a circular desde ese momento no se ajustó al dialogo que tuvo el presidente con la británica pero se convirtió en un infierno para los argentinos que vieron como se les complicaba el viaje de Macri a la ONU. De hecho Susana Malcorra tuvo que salir a desmentir.

Mediante un comunicado, la canciller contó que Macri habló con May sobre "la posibilidad de tener un encuentro más específico para avanzar en los múltiples temas que tenemos, entre los cuales está la cuestión de Malvinas que, para nosotros, es prioritario".

"Por supuesto la Primera Ministra dijo que se encontrarían, pero no es que se habló de una hoja de ruta, o dónde van a ser los próximos pasos, que este tema esté cerrado y arreglado y avanzado", añadió la y sostuvo que la soberanía es una cuestión por debatir con Gran Bretaña, pero "de ahí a decir que el tema ya está en la mesa, y que ya hemos acordado avanzar en el tema hay un gran recorrido".

"Puede que no lleguemos a nada, que avancemos en algunos temas y otros no o que nos tomen años. Es una señal de disposición de dialogar", remarcó.

Jornada

Macri arrancó el día ayer bien temprano con un desayuno en Naciones Unidas que ofreció Ban Ki moon a las delegaciones y luego al almuerzo de presidentes. Paso toda la mañana y gran parte de la tarde dentro del edificio de la ONU y solo se cruzó un rato a las oficinas de la misión argentina ante el organismo para saludar a todo el equipo allí y sacarse fotos.

Fue en esos desplazamientos en los pasillos que Macri tuvo encuentros no formales con el presidente de Colombia Juan Manuel Santos, el de Ucrania Petro Poroshenko, el emir de Qatar, Tamin bin Hamad al Thani, el canadiense Pierre Trudeau y, el conflicto del día, Theresa May. El encuentro con la delegación de Palestina se suspendió, quizás uno de los coletazos de la cena que tuvo el día anterior Macri en la casa de Jack Rosen, presidente del Congreso Judío Americano donde le armaron al presidente argentino tres mesas, dos de 8 personas y una de 13, con empresarios y financistas que querían conocerlo.

Fuente: otrosambitos.com.ar