El gobernador no oculta sus temores por la situación del país

 

Por: Darío H. Schueri – Desde Santa Fe.#

 

Tres definiciones del Gobernador en un reportaje concedido a un programa radial de esta capital: desconfía de las medidas tomadas por el gobierno nacional ante la crisis del dólar. No negociará obra pública – inferimos-  por la deud; y está plenamente convencido que saldrá la ley de necesidad de la reforma constitucional.

 

Para entender lo que nos pasó, nos pasa y nos pasará, sería bueno repasar lo escrito por el analista político camuflado de humorista, Alejandro Borensztein en "Clarín" de este domingo. Pinta la realidad argentina al estilo del "Kapelusz ilustrado".

Fronteras adentro, el Gobernador Miguel Lifschitz en diálogo con nuestro programa "Desafíos en la Radio" (FM 96.7 Rivadavia Sta Fe) este sábado admitió que la realidad del país es "muy complicada, como lo ve la mayoría de los argentinos", y lo justificó en la memoria histórica: "estas cosas que están pasando en Argentina, nos traen muchos recuerdos de cosas parecidas que ocurrieron en otros momentos institucionales de la Argentina y que terminaron muy mal, dijo, entonces nos pone en alerta", definió.

Lifschitz habló de "corrida bancaria, corrida financiera" y la operación de "los grandes jugadores de la especulación"; aludiendo a un BCRA que "tiene dificultades para ponerle freno al dólar; las tasas suben, aumenta la inflación y cae el crecimiento, que es el escenario en que estamos transitando, bueno ya sabemos cuáles son las consecuencias sociales y políticas que esos modelos económicos van trayendo". Pidió un gobierno nacional "más sensible y estar más atento a escuchar otras voces y no solamente las voces del círculo rojo"

El Gobernador no ahorró en expresividad para señalar que el materia de obra pública (canje que en parte quiere hacer el gobierno nacional por la deuda por coparticipación) la gestión de Macri prácticamente no viene cumpliendo en la Provincia de Sta Fe: "nosotros no hemos disminuido un centavo en la obra pública, a contramano de lo que está ocurriendo en el país", asestó.

Con respecto de la negociación por la deuda histórica, el Gobernador estuvo el viernes pasado reunido con el Ministro del Interior Rogelio Frigerio. El canje por obra pública – se evidencia en las palabras del propio mandatario – sería casi inviable; hoy el eje de las discusiones pasan por el mecanismo que permita mantener el pode adquisitivo de los bonos que ofrece el gobierno nacional, desde su emisión hasta la fecha de vencimiento. ¡Y vaya día que le tocó al Gobernador sentarse con Frigerio!.

En términos políticos, el Gobernador, con renovado optimismo, aseguró que la reforma de la Constitución "se va a lograr; no será ahora, será dentro de un mes, quince días, dos meses, pero más tarde o más temprano vamos a tener reforma en Santa Fe".

El mensaje del Poder Ejecutivo habilitando la reforma constitucional ingresó formalmente el jueves pasado por Diputados, fue remitido a tres comisiones internas y se debatirá conjuntamente con dos iniciativas más que ingresaron los diputados Héctor "Tigre" Cavallero y Luis Rubeo.

¿Por qué expresa tanta convicción el Gobernador de que la Ley saldrá dentro de los tiempos necesarios para llevar adelante este año la Convención Constituyente, cuando en el encriptado ambiente político legislativo no se avizora lo mismo?. Naturalmente desconocemos las cartas que tiene en sus manos el Primer Mandatario; pero deben ser importantes para abrigar semejante esperanza.

No faltó quien le sugiriera al Gobernador que, habida cuenta de las plausibles intenciones de los senadores peronistas – inclusive reeleccionistas por parte de Armando Traferri – de votar la ley de necesidad de la reforma, sea el representante socialista por La Capital Miguel González quien ingrese un mensaje similar al del Poder Ejecutivo por ésa Cámara.

Frente de tormenta

Cambiemos suspendió para este lunes en Rosario una sugestiva conferencia de prensa en la cual y con la presencia de José Corral, de quien se dice es el autor de la iniciativa, se anunciaría que el interbloque  macrista no apoyaría la ley de necesidad de la reforma constitucional en los tiempos planteados por el Gobernador. "Expresarnos públicamente es un "fair play" para con el Gobernador", dejaron trascender en el entorno del lord mayor santafesino, quien tendrá que lidiar con el presidente de su Partido Julián Galdeano, poco propenso a anticipar de manera tan contundente los tiempos.

Un psicólogo se hubiera internado al escuchar las paranoicas especulaciones en torno de dicha rueda de prensa; nunca – hasta ahora-  anunciada oficialmente. Pero es evidente que la fuerza casi sobrenatural que le pone el Gobernador a la reforma constitucional, obliga a todo el mundo a dormir con un ojo abierto, y tener la guardia bien alta.

Máxime en estos tiempos tan azarosos de la política.

Fuente: otrosambitos.com.ar