Carlos Ensinck: “La corte suprema de justicia tiene que abrir una mesa de consenso”. .

El presidente del Colegio Carlos Ensinck dijo en Otros Ámbitos (Del Plata Rosario 93.5) que desde su reanudación ocurrida el 18 de junio, luego de tres meses de parate por la irrupción de la pandemia, el servicio de justicia en la provincia de Santa Fe atraviesa su peor momento.

El Colegio de Abogados de la Segunda Circunscripción realizó una evaluación de lo sucedido en estas últimas dos semanas y halló que el Poder Judicial incurre en importantes contradicciones que perjudican el avance de las causas y ponen en riesgo la salud de todas las personas que asisten al Tribunal.

Una de las contradicciones principales tiene que ver con la exigencia de jueces y juezas de efectuar notificaciones por medio de soporte papel (para lo que el oficial notificador debe circular por el Tribunal a llevar la cédula), a pesar de contar con la herramienta tecnológica de la notificación electrónica, contrariando de este modo la sugerencia de evitar la aglomeración de personas en lugares cerrados.

Por otro lado, para poder acceder a un expediente el abogado o abogada debe sacar un turno por cada uno de esos expedientes, ya que el Poder Judicial no autoriza a revisar más de uno por vez. Esto aunque el profesional se encuentre en el edificio, a sólo metros del juzgado.

Como cada turno se otorga cada 15 días aproximadamente, además de obligar al profesional a ir en reiteradas ocasiones el edificio, se causa una demora innecesaria en la tramitación y resolución de los casos. Bajo esa misma modalidad trabajan la oficina de procesos sucesorios, los juzgados laborales, de familia, civil y comercial.

Otro de los puntos que entorpecen el servicio de justicia en la provincia radica en que los juzgados cancelan discrecionalmente los turnos y sin avisarle de antemano al profesional, quien acaba enterándose de la suspensión en el mimo momento, haciéndolo además de exponerse al contagio para luego no ser atendido.

El sistema informático no agiliza los tiempos, más bien todo lo contrario: los correos electrónicos enviados se imprimen y se agregar al expediente, generando más demoras.

El pasado 5 de mayo, la Corte Suprema de Justicia de la Provincia de Santa Fe creó una Comisión para la implementación de nuevas tecnologías informáticas en el ámbito del Poder Judicial y hasta el día de la fecha no ha emitido ningún dictamen.

Las audiencias, otro grave problema

Con respecto a las audiencias, quizás uno de los temas que suscitan más preocupación en el contexto de la pandemia y el necesario cuidado de la salud, el Poder Judicial no ha dado a conocer un protocolo específico para la celebración de las mismas, a pesar del largo receso con el que contó.

Y muchas de las audiencias acaban reprogramándose para el año próximo, lo que resulta absurdo ya que las mismas terminan siendo tomadas no por un funcionario público (juez o secretario), sino por los abogados de cada parte.

Otro inconveniente resulta de la diversidad de criterios entre los juzgados y las oficinas del Tribunal que interactúan con los mismos, que se ha multiplicado en este último tiempo. Cada Juzgado tiene su criterio para notificaciones, audiencias, escritos, correos, vistas de expedientes y tantos trámites con expedientes y profesionales se tramiten.
En cuanto a la cuestión sanitaria, no se ha informado acerca de algún plan de contingencia para el caso de que haya un rebrote de los contagios de Covid-19. Y resulta necesario saber si el Poder Judicial está trabajando en el mismo a los fines de evitar volver a una situación de parálisis total o semi parálisis de la actividad.

Con todo esto, la conclusión es que dirigidos por un Poder judicial que no escucha a los justiciables, pero que sí cobra sus salarios desde marzo, no hay posibilidad de acceso a la justicia.