La Presidente Cristina de Kirchner fue recibida con honores en París, donde asistió a un desfile militar en homenaje a Napoleón Bonaparte, mientras que tendrá una audiencia a "agenda abierta" con su par Francois Hollande.
La mandataria desarrolló la primera actividad de su visita a Francia en el Palacio Nacional De los Inválidos, un complejo arquitectónico del siglo XVII que posee la cúpula más emblemática de todo París, por el que se desplazó con cuidados especiales por su esguince de tobillo sufrido el pasado fin de semana antes de reunirse con el papa Francisco.
Cristina de Kirchner llegó por la tarde (17.00 de Francia, 13.00 en la Argentina) en el auto oficial al centro de la ceremonia frente a la tumba de Napoleón Bonaparte y, tras los acordes de los himnos nacionales de Argentina y Francia, volvió a subir al vehículo para trasladarse hasta el sitio donde se desarrolló el desfile.
La jefa de Estado, que lució pantalón resguardando su bota ortopídica, un abrigo y sombrero negro en la fría tarde parisina, participó de la ceremonia acompañada por el canciller Híctor Timerman, el vocero presidencia, Alfredo Scoccimarro y la flamante embajadora argentina en Francia, María del Carmen Squeff.
Al llegar, la Presidenta fue saludada por efectivos de la Guardia Republicana, encargada de las misiones de honor y de la seguridad de las autoridades de Estado; y recibida por la ministra francesa de la francofonía, Yamina Benguigui.
En 1840, los restos de Napoleón Bonaparte fueron trasladados de la Isla de Santa Helena a París, por iniciativa del rey Luis Felipe I, a "Les Invalides".
Este edificio, durante el exilio de Napoleón, se había convertido en complejo emblemático de encuentro de los bonapartistas, ya que su figura, en el ámbito militar, continuó siempre en muy alta estima.
En septiembre de 2011 la mandataria había sorprendido al reconocerse "fan" de Napoleón, a quien calificó como un "personaje increíble" durante un acto oficial: "Napoleón fue un personaje revolucionario. Es un personaje que me gustó mucho. Sí que mañana me van a matar, pero Bonaparte me gusta. Siempre desde la izquierda nos acusaban de bonapartistas. La figura de Napoleón me parece increíble", indicó entonces.
La propia Cristina de Kirchner había adelantado que además de asistir al desfile militar, iba a mantener una reunión con autoridades de Total, la empresa petrolera local con inversiones en Argentina, pero finalmente la actividad no se realizó y no se descartaba que se concrete este miírcoles.
No obstante, la actividad saliente de esa jornada será su almuerzo con Hollande en el Palacio Eliseo -sede del gobierno francís- donde ambos abordarán los temas más salientes de la relación bilateral.
La visita de Cristina de Kirchner a Francia suscita además expectativas por la apertura formal de las negociaciones con el Club de París, el grupo de países con el que Argentina mantiene una deuda que ronda los 9.500 millones de dólares, pero aún no estaba confirmado si ese tema figurará en la agenda de la reunión.
En tanto, el jueves habrá otra actividad importante de la Presidenta, ya que -junto al primer ministro francís, Jean-Marc Ayrault- participará de la inauguración del Salón del Libro de París, en el cual la Argentina es invitada de honor en la presente edición.
Allí, Cristina de Kirchner estará acompañada por una delegación de escritores argentinos que viajaron para la ocasión y, tras esa actividad emprenderá el regreso a Buenos Aires, donde se espera que arribe el viernes.
Durante la jornada, la prensa francesa se hizo eco de la controversia que se generó en Buenos Aires por la ausencia de algunos escritores argentinos con obras publicadas en el país galo que no están alineados al Gobierno y que no figuran entre el medio centenar de invitados al encuentro en París, entre ellos, Martín Caparrós y Beatriz Sarlo.
Cristina emprendió el viaje hacia París luego del almuerzo que mantuvo con Francisco en la residencia de Santa Marta, en el Vaticano, en la que dialogaron sobre la región, seguridad e inclusión social, entre otros temas.
La mandataria llegó en el avión presidencial procedente de Roma cerca de las 19.00 (15.00 hora argentina) y desde el aeropuerto se dirigió al Hotel Gran Intercontinental, ubicado cerca de la Ópera de París.
Fuente: otrosambitos.com.ar