La economía sigue fría y no le da tregua a ningún sector

La desaceleración de la actividad económica en el primer trimestre del año y su continuidad en los meses siguientes muestra signos inequívocos. A la caída de la producción automotriz y de la construcción, le siguieron los indicadores de ventas minoristas —que llevan cinco meses consecutivos en baja— y la reducción del consumo de producciones primarias e industriales clave en la Región Centro.

   “En lo que va del año, las señales de enfriamiento de la economía están apareciendo con bastante nitidez”, apuntó la economista Ana Inís Navarro, a cargo del informe sobre Indicadores Económicos de la Región Centro de Universidad Austral, quien puntualizó que la producción de autos se contrajo interanualmente 18,5% en el primer bimestre del año y el declive de la construcción privada es de magnitud similar. “El impacto de ambas en el empleo formal muy preocupante: en la construcción cayó 1% respecto al primer bimestre del año pasado y, lo más grave es que comparando con el nivel de empleo formal dos años atrás, la pírdida de puestos de trabajo asciende ya a 6.648 personas”, puntualizó.

   Por otra parte, el estudio que conduce Navarro con cierre en mayo de este año, revela que la cosecha gruesa superará con creces la del año anterior, pero aún así, por ahora la demanda de insumos no aparece.

   El estudio de indicadores regionales muestra que las ventas de gasoil cayeron interanualmente 6,9% y la industria de la maquinaria agrícola, aunque sigue exportando no sin dificultad, tiene alta capacidad de producción ociosa por falta de demanda interna.

   En tanto, el relevamiento realizado por Ieral Fundación Mediterránea, fechado los últimos días de mayo, indica que “la mayoría de las regiones sufre la contracción de la economía, excepto algunas zonas de la Patagonia”, una situación que diferencia a la coyuntura actual a la de la que se vivió durante la crisis de 2009, “cuando el impacto sobre las provincias fue heterogíneo”, según el estudio elaborado por el economista Jorge Vasconcelos.

   “Ahora la caída del nivel de actividad es generalizado, dominado por la contracción del mercado interno”, reveló.

   El informe de Ieral indica que el indicador global de actividad para las regiones (denominado monitor provincias), “llamativamente muestra en el primer trimestre de este año una caída mayor a la del estimador privado del PBI nacional”. Según precisó el mismo relevamiento “una explicación es que el monitor de las provincias, por su composición, tiene un sesgo hacia el mercado interno. Y como actualmente el ajuste se nota más en ese mercado, es mayor la contracción”.

   A la hora de analizar la situación por regiones y realizar una mirada más integral, el informe de Ieral hace un repaso de los últimos cuatro años, en el período pos crisis. Allí se muestra que en la región Pampeana (excluyendo la Ciudad de Buenos Aires), que genera más de la mitad de PBI nacional, en el periodo de los últimos cuatro años considerados, Santa Fe y Córdoba son las jurisdicciones que han mostrado un desempeño más flojo que el promedio nacional. Y en todas las provincias de esta región presentan una caída de la actividad en el primer trimestre de 2014.

En el pago chico. El Indicador Local de Ciclo Económico (Ilce) estimado por la Universidad Austral para la provincia de Santa Fe, muestra, por otra parte, una variación interanual promedio para el primer bimestre del año, de 4,2%, fundamentalmente porque se compara con los comienzos del año pasado donde la economía estaba aún muy afectada por la mala performance de 2012.

   “Más informativo resulta el comportamiento mensual del Ilce que muestra tasas en descenso desde el último trimestre de 2013”, precisa Navarro. Explica al respecto que en enero el aumento mensual estimado es de 0,2% y en febrero se reduce a 0,1%. “De seguir este comportamiento, la economía entraría en recesión en el segundo semestre del año”, agregó la economista rosarina.

   A su juicio, mucho dependerá de lo que pase con el empleo, muy jaqueado por suspensiones y despidos en varias industrias claves, y con las expectativas de los consumidores al respecto; si aumenta el desempleo, el consumo se resentirá en la medida que la prudencia aconseje a las familias a no gastar a cuenta de un ingreso que no se tiene la certeza de retener.

Los números del consumo. El informe de Ieral explicó que la caída de actividad en las provincias por encima del PBI nacional en buena parte se explica por la desaceleración del mercado interno. En ese punto, el estudio de Universidad Austral lo confirma.

   Según el mismo en la Región Centro las ventas al mercado interno de productos lácteos (últimos datos disponibles febrero 2014) medidas en pesos constantes en el primer bimestre de 2014, crecieron 8,1%. Sin embargo, la falta de datos de precios por productos que habitualmente publicaba el Instituto Provincial de Estadística y Censos (Ipec),”impide hacer una estimación más precisa de la marcha real del consumo interno de lácteos”, puntualiza y señala que “para dar una idea de la evolución de los precios, en febrero 2013 el precio promedio de la leche entera en sachet en la ciudad de Rosario, calculado por el Ipec, ascendía a $5,03, un año más tarde los valores están por lo menos 50% arriba”. Es decir que,”al deflactar por cualquier índice de precios sin tener una canasta de precios más ajustada a los lácteos, es probable que se estí sobreestimado el consumo”.

   Coyunturalmente, en el mes de febrero el consumo de lácteos medido a precios constantes, habría caído 0,3% en la provincia de Santa Fe con tendencia estable. La comparación interanual muestra una brecha favorable de 13,7%. En Córdoba las ventas habrían caído en febrero (1,4%) con tendencia estable y expansión interanual de 6,6%. En Entre Ríos, los datos estimados muestran una suba en el consumo de (1,8%) con tendencia creciente (0,9%).

   En cuanto al consumo de carne vacuna vacuna “medido en pesos constantes, en la Región Centro cayó 2,6% en el primer bimestre de 2014 respecto al año anterior”. El desempeño fue favorable para Santa Fe (0,1%) y Entre Ríos (24,9%), mientras que en Córdoba tuvo el signo contrario (7,1%). Pero el estudio hace la misma salvedad que para los lácteos sobre falta de datos de una canasta.

“Coyunturalmente, el consumo interno de carnes habría experimentado una caída (1,2%) en los supermercados de la Región en febrero, con tendencia estable. En Santa Fe la disminución registrada es de 0,3% con tendencia estable. En los supermercados de la provincia de Córdoba el consumo cayó 0,5% respecto de enero, tambiín con tendencia estable. En Entre Ríos las ventas estimadas de carnes cayeron 0,1% respecto de enero, con tendencia creciente (0,7%).

   Por su parte, a nivel de producción industrial, en febrero cayó el procesamiento de aceite en Santa Fe (1%) con tendencia decreciente (2,2%) y la producción de pellets cayó respecto a enero (4,2%) con tendencia decreciente (3,4%). La extracción de aceites -247,4 miles de toneladas- se expandió 32,2% y la producción de pellets de soja -0,9 millón de toneladas- registró una suba de 30,2% respecto a febrero de 2013.

   En Córdoba, la producción de aceite y de pellets mostró tendencia decreciente (3,2% y 4,1% respectivamente). La extracción de aceites -9,2 mil de toneladas- se contrajo 37,3% mientras que la producción de pellets de soja -35 mil toneladas- registró una caída de 32,5% respecto a febrero de 2013.

   Finalmente, la industria automotriz de la Región Centro entregó 37.314 unidades en el primer bimestre de 2014 registrando una caída de 18,5%. La baja está asociada a la contracción de la cantidad de vehículos demandada en el mercado local luego de la suba de precios de los autos producto de la devaluación y, a una menor demanda brasileña y de los demás mercados de exportación como Venezuela, Perú y Ecuador entre otros.

   Coyunturalmente, en febrero, la producción de la Región registró una caída de 1%, con tendencia decreciente (1,6%). La brecha a.a fue negativa y de 17,4%.

Fuente: otrosambitos.com.ar